Bálsamo Labial con Miel y su Estuche

Proteger a las abejas es un tema de actualidad: además de ser un eslabón esencial para mantener la biodiversidad, los apicultores nos regalan sustancias con virtudes inigualables, utilizadas desde hace siglos para la belleza de la piel. Más información.

Miel, jalea real, cera de abejas, propóleo: los productos de la colmena contienen tesoros con beneficios demostrados para la salud. Y no es casualidad que la industria cosmética los utilice con tanta frecuencia... Descubra losartículo

Constantemente expuestos a las agresiones externas, tus labios necesitan una atención especial. Tanto si eliges un bálsamo como un stick hidratante, con NUXE podrás cuidar tus labios día tras día... Descubra losartículo

A menudo puestos a prueba, los labios pueden resecarse o irritarse mucho. Antes de aplicar una crema hidratante, elimina los restos de piel muerta de los labios con un exfoliante labial suave y natural. Masajea los labios con el dedo índice mediante suaves movimientos circulares y acláralos con un disco de algodón húmedo. Exfolia tus labios para prepararlos para el tratamiento, pero no lo hagas más de una vez a la semana para evitar que se vuelvan aún más frágiles. A continuación, aplica varias veces al día un producto reparador labial especialmente diseñado para labios muy secos y estropeados. Por la noche, antes de acostarse, no dude en aplicar una capa gruesa para conseguir un auténtico "efecto venda".

Durante la estación fría, los labios son fácilmente propensos a la sequedad, la tirantez, la irritación y las grietas. Por eso es esencial hidratarlos y protegerlos eficazmente todos los días en invierno. Para mantener tu piel suave y tu boca irresistible cuando bajan las temperaturas, cuida bien tus labios. Evita humedecerlos con la lengua y con barras de labios mate, no los descuides al desmaquillarlos y bebe mucha agua. Por la mañana y por la noche, opta por un producto de cuidado labial que contenga miel, un aceite o un bálsamo calmante, para suavizar y reparar los labios secos y estropeados. Durante el día, no dudes en tener a mano un stick para poder reaplicarlo tantas veces como sea necesario. Antes de acostarte, utiliza tu bálsamo nutritivo como mascarilla, siguiendo las instrucciones de uso.